Amanda Lepore

Si nunca has oído hablar de ella, probablemente hayas pasado los últimos 20 años bajo tierra, como los personajes de la película de Kusturica, “Underground”, o tan dopado de medicina para contrarrestar tu déficit de atención que todavía te cueste recordar tu nombre. Date un voltio por google y, si eres capaz de procesar toda la información publicada acerca de ella, vuelve aquí sabiendo que casi todas esas historias que has leído con los ojos como platos son ciertas. Es mi primer consejo. Este texto está cargadito de spoilers así que mejor que acudas a él previamente informado.

La musa de la escena club kid, referencia visual y estética de una década (los 90), un fotógrafo (David Lachapelle), un concepto (la decadencia plastificada trans con glamour) y una ciudad (Nueva York, qué otra podía ser) visitó Barcelona y compartió su música en el templo nocturno Razzmatazz. Nosotros estuvimos con ella varias horas en su hotel donde pudimos comprobar cómo Amanda Lepore se customiza su propia ropa, llena de diamantes sus Vuitton/Laboutin (hay que tener paciencia y tiempo además de poderío) y se desnudó (literal y metafóricamente hablando) ante nosotros, pobres almas de boca abierta y mentón caído. Lo suyo fue todo un prívate-show en directo, de una cercanía abrasiva. De trato exquisito y sonrisa imborrable, nos fue ganando a todos y cada uno de los que tuvimos la suerte de compartir nuestro tiempo con ella, gracias a su autenticidad. ¿Quién iba a decirlo? Amanda Lepore exuda candidez e inocencia. Amanda Lepore, construida a si misma (de nuevo, literal y metafóricamente hablando) es un icono perfecto de autenticidad imbatible. Como resultado me sorprendí emocionado una noche en Barcelona ante la fragilidad y afectividad de una transexual desnuda que me hablaba con una sencillez envidiosa. Lo que yo llamo un mito.

V SPAIN Siempre te consideraste una chica. ¿Cómo fueron tus primeros años?

AMANDA LEPORE Muy difíciles. No podía vestirme como una chica o juntarme con las chicas en sus clases de gimnasia. Fue muy complicado para mí.

V S ¿Cuándo y cómo se da el cambio?

Un poco más tarde… Siempre me comporté de manera femenina. Comencé a tomar hormonas con quince años. Ese fue el momento en el que empecé a modificar mi cuerpo. Me hacía las cejas y cosas de esas que me podía hacer yo misma, pero no fue hasta que me hormoné que considero que comenzó ese cambio del que hablas.

V S Eres cantante, performer, anfitriona de fiestas… ¿Eres muchas?

Para mí es todo lo mismo. No me siento diferente en ninguna de esas facetas. Todas funcionan.

V S ¿Cómo es un día normal en tu vida?

Hago cosas normales: voy al mercado, al gimnasio, hago yoga. Si no estoy trabajando me gusta relajarme, ver a amigos. Cosas de ese estilo.

V S Cuéntanos algo de la escena “Club Kid” que no sepamos. Algo personal.

Creo que todos los medios se obsesionaron con el tema de las “drogas”. Pero para mí eso no era lo atractivo de salir, de formar parte de esa escena. Había gente extremadamente creativa que se hacían sus propios disfraces. A mí me encantaba vestirme para salir por la noche. Era una forma de autoexpresión: sacabas al mundo quién realmente eras o quién realmente querías ser. Pero los medios sólo hablaban de drogas, drogas, drogas, drogas. Que estaban ahí, desde luego: luego con la escena rave y el rollo ese de quedarse despierto toda la noche quizás sí que se convirtiera en eso. Pero para mí eso no era lo que yo vivía, lo que me atrajo de todo ello. Fueron años maravillosos.

V S ¿Cómo conociste a David LaChapelle?

Michael Alig (hoy en prisión condenado por asesinato) me contrató como gogó y David me vio allí trabajando. Él solía dibujar mujeres que se parecían mucho a mí y cuando me conoció, flipó. Me dijo: “llevo dibujándote toda la vida”. Me llamó e hicimos una sesión, el de los diamantes, para Visionaire Magazine y luego algunos editoriales de moda. Hicimos muchísimas fotos, muchas de las más famosas, en un fin de semana.

V S ¿Cómo hubiese sido tu vida sin él?

La gente de Nueva York me conocía, pero de una manera mucho más relacionada con los clubs. Desde luego, antes de conocerle, yo era muchísimo más underground. Con las fotos de David, me convertí en un icono mundial. La gente de la moda, artistas… a partir de las fotos de David me conocieron y digamos que me dejaron entrar en su mundo. Yo me dejé llevar. Me encantaba la creatividad de David, con esa luz tan bonita, aún en las cosas más freaks.

V S ¿Me zurrarías si te pregunto qué edad tienes?

No, para nada. Pero no te contestaré.

 

TEST METRALLETA

1.- ¿Rubalcaba o Rajoy?

No sé quiénes son [le explico que tenemos elecciones y decide que el que más se parezca a Obama. Desisto en intentar explicarle que ninguno de nuestros dos candidatos es negro]

2.- ¿Madonna o Lady Gaga?

La Madonna del comienzo.

3.- ¿Ocuppy Wall Street o el Tea Party?

¿Qué es todo eso? Me quedo con Wall Street, porque a los tíos traviesos con traje les gusto mucho.

4.- ¿Sarah Palin o Anne Wintour?

Anne Wintour, por supuesto.

5.- ¿Bob Dylan o Andy Warhol?

Warhol.

6.- ¿Amigos o fans?

Los dos. A veces los amigos terminan siendo fans y los fans pueden llegar a convertirse en amigos.

7.- ¿Cocaína o heroína?

No sé… Yo sólo tomo pastillas para la dieta.

8.- ¿Gay o trans?

Las dos. Para mí es lo mismo. Nuestras historias son muy parecidas.

9.- Luz u oscuridad.

Luz.

10.- ¿Party Monster o Shortbus?

¿Qué es “Shortbus”? “Party Monster” porque salgo yo.

11.- Una buena pizza o un buen hombre.

Los dos. Pero una buena pizza y un mal hombre tampoco me va mal, es lo que me suele tocar.

12.- Desnuda o maquillada.

A mí la verdad es que me gusta estar desnuda Y maquillada.

 

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